Nombre

DE ARAGÓN Y DE NAVARRA, CONSTANZA

Marco temporal

ca. Julio 1342 – 18 de julio de 1363

Marco Geográfico

Cataluña, Sicilia

Perfil biográfico

Constanza nació en Poblet (Conca de Barberà, Tarragona) en los últimos días del mes de julio de 1342 (CINGOLANI, 2019; ACA reg. 1305, f. 60v)*. Era la primogénita de Pedro el Ceremonioso (1319-1387) y de María de Navarra (ca. 1327-1347).

Su padre, Pedro el Ceremonioso o el del Punyalet, era hijo de los condes de Urgell, Alfonso el Benigno (1299-1336) y Teresa de Entenza (ca. 1301-1327). Reinó durante más de cincuenta años de enfrentamientos y de grandes cambios. De este soberano conviene recordar su “obsesión por preservar la dignidad y el poder de su casa, la Casa de Aragón” (CINGOLANI, 2007). De ello deriva su necesidad de recopilar escritos, ordenanzas, libros, tumbas, reliquias y obras de arte con la clara finalidad de “venerar a su dinastía y a su persona”.

Su madre, María de Navarra, era la segunda hija de Juana II de Navarra (1311-1349) y Felipe de Évreux (1306-1343), ambos de la dinastía Capeta. Por ello, era bisnieta del rey Luís el Obstinado (1289-1316) de Francia.

Contrajo matrimonio con el rey de la corona catalanoaragonesa en julio de 1338 en Alagón (Aragón), cuando todavía no había cumplido los 12 años. Llevaba consigo todas las tradiciones de la corte francesa. Tenía poco más de veinte años cuando murió y tuvo cuatro hijos. De su corta vida tenemos pocos detalles pero conviene recordar que con su nombre se rubrica el Libro de Horas de María de Navarra, un encargo de Pedro el Ceremonioso al taller de Ferrer Bassa, que se custodia en la Biblioteca Nazionale Marciana de Venecia.

En 1347 Constanza fue proclamada heredera legítima de la Corona de Aragón, con la consiguiente protesta del hermano del rey, Jaime de Urgell (ca. 1320-1347), y los enfrentamientos con los de las Unions (Aragón y Valencia). El problema se resolvió con el nacimiento de un heredero varón, el futuro Juan I (1350-1396), hijo de la tercera esposa de Pedro el Ceremonioso. Des de este momento, la reina Eleonor de Sicilia (ca. 1325-1375), calificada como la “espléndida y maquiavélica reina de la noche” (SCIASCIA, 2010/12), negoció el matrimonio de su hermano Luís el Niño, rey de Sicilia, con la infanta Constanza. Era necesario mantener y reafirmar las alianzas con la monarquía insular de Sicilia.

Poco sabemos de la infancia de Constanza, pero podemos imaginarla cerca de sus hermanas y de su madre hasta su muerte en 1347. Según parece era de complexión delicada ya que, antes de haber hecho el año, su madre había encargado unas imágenes (exvotos) para ser entregadas al monasterio de Montserrat y a la capilla de santa Eulalia. La única referencia directa de vida familiar en la Crónica de Pedro el Ceremonioso (SOLDEVILA, 2014) relata el viaje de su esposa María y sus hijas Constanza y Juana de Barcelona a Perpiñán, la Navidad de 1344, y dice así: “Dimecres, a vint-e-dos de desembre de propdit, nós estant a Perpenyà, venc la reina dona Maria, muller nostra, ab les infantes Na Constança e Na Joana, filles nostres, de les parts de Barcelona”. Constanza ya tenía dos años y Juana estaba en su segundo mes de vida.

Entre los escritos y cartas de Pedro el Ceremonioso conservados en el Archivo de la Corona de Aragón, algunos nos ayudan a conocer la relación que el monarca mantuvo con sus hijas*. Así, por ejemplo, en 1350, el rey ordena a sus hijas Constanza y Juana vestirse de luto por la muerte de su abuela, Juana de Navarra (Barcelona, ACA, Reg. 1133, f. 26r), mientras que poco después ese mismo año el monarca rechaza dar autorización a sus hijas para asistir a la coronación del rey de Navarra el 27 de junio de 1350 (ACA, reg. 1134, f. 37r-v), escribe así:

1350, abril, 1. Saragossa. Lo rey d’Aragó.

Cara filla, reebudes dues letres vostres, et les coses en aquelles contengudes bé enteses, responén vos fem saber que, mercè de Nostre Senyor, som sans et en bona disposició de nostra persona, e havem haüt et havem gran goig et plaer de la salut vostra et de la alta infanta dona Johana, filla nostra et sor vostra molt cara. E res-no-menys vos fem saber que havem manats dar al feel porter vostre Sanch[o] d’U[n]castiello M solidos barchinonenses per comprar un mul a obs de les andes; altra moneda, quant a adés, no us o po[de]m trametre, mas volem que manlevets açò que mester haurets tro a Perpenyà, car nós, qui, si a Déu plau, serem dins breus dies en Cathalu[n]ya, farem pagar complidament ço que manlevant haurets. Quant és de ço que·ns havets fet saber de la reyna de Ffrança, havem haüt gra[n] plaer, et ja o sabíem ans que les vostres letres reebéssem. Açò que deyts, que vós et la dita infanta anàssets a la conoració del rey de Navar[r]a, no·ns sembla cosa covinent, ans volem que, ab la benedicció [de] Déu, tingats vostre camí vers Perpenyà. E porets fer resposta sob[r]e açò a la comtessa de Ffoix, que vós et la dita infanta, de manament et ordinaci[ó] nostre, anats a Perpenyà, et con serets là, et ella serà en lo comtat de Ffoix, vós porets ve[n]ir dins nostra t[err]a en alcu[n] loch covi[n]ent, notifficàn-li [que la?] havets gran desig de veer.

D[ata] en Çaragoça sots nostre segell secret [l]o dia primer del mes d’abril en l’any de Nostre Senyor MCCCL. Rex Petrus.

Dominus rex mandavit Matheo Adriani.”

Pocos días después, el 19 de abril de 1350, en otro registro (ACA, reg. 1134, f. 44v), el rey convoca a sus hijas para que lo acompañen a Poblet en la traslación del cuerpo de su madre, María de Navarra.

Unos años más tarde, en una carta del Cerimoniós a su tío, Pere de Ribagorça i Muntanyes de Prades, datada en abril de 1354, le pide consejo ante el proyecto matrimonial de su hija Constanza con el rey de Sicilia. Le dice que como tutor de ésta le ruega que “porti totes les joy[e]s de la dita infanta, per tal que, si finarem de fer lo dit matrimoni, que no calla laguiar per aquellas.” (ACA, reg. 1067, f. 90r).  De acuerdo con el testamento de María de Navarra, las infantas habían de pasar a estar bajo la tutela del infante Pere de Ribagorça cuando su esposo contrajese nuevas nupcias.

La casa de las infantas vivía de las rentas que procedían del legado materno y de las asignaciones que el rey estipulaba y, por lo que parece, nunca llegaban puntualmente y se tenían que tramitar continuos préstamos para cubrir el día a día.

En un apunte del Arxiu Històric de Protocols de Barcelona del 1359 (AHPB, 23/8, f. 62r 17-4-1359) consta que ambas infantas tuvieron que empeñar en Perpiñán unas coronas para el mantenimiento de su corte.

La casa o corte de las infantas se desplazaba continuamente (Barcelona, Perpiñán, Huesca, Lérida, Montblanc, Tarragona, Valencia, etc), a menudo seguía los movimientos de la reina o del rey. Uno de los lugares donde posiblemente pudieron haber hecho alguna breve estancia fue la residencia de la última esposa de su bisabuelo, la reina Elisenda de Montcada (1292-1364), ya que era madrina de la infanta Joana. En aquellos años la reina Elisenda vivía en el palacio del monasterio de Pedralbes donde ya se había pintado la celda de Sant Miquel con los frescos del taller de Ferrer Bassa.

De la relación de Constanza con su madrastra, Elionor de Sicília, no tenemos demasiadas noticias, exceptuando algunas notas de encargo de vestuario y obsequios para las infantas y la utilización que ésta hizo de su hijastra para conseguir controlar el reino de Sicilia. Después de muchas negociaciones y arduas maquinaciones, en 1354, se firmó el acuerdo matrimonial con el rey Luís I el Niño de Sicilia (1337-1355). A la muerte de éste, el acuerdo pasó a su hermano pequeño, Federico IV (III) el Simple (1342-1377). Y, finalmente, el 21 de septiembre de 1356, en Perpiñán, se firmó el acuerdo matrimonial, pero no fue hasta el 15 de abril de 1361 que tuvo lugar la boda en Catania (Sicilia), después de burlar la vigilancia de los nobles sicilianos que querían impedir esta unión.

Durante el breve tiempo que fue reina de Sicilia estuvo en funcionamiento la Corte de Constanza o Càmera règinale di Costanza, que se regulaba por las Ordinacions sobre lo regiment de tots los officials de la sua cort de Pere el Cerimoniós del 1344. Esta corte se fue reuniendo en el Castillo Ursino de Catania o en el Castillo Maniace de Siracusa hasta la muerte de la reina. De los documentos que aun se conservan es especialmente interesante una nota de la Curia del Archivo de la Corona de Aragón (MR, 472, f. 17v.) en la que la reina encarga obras del pintor Jaume Serra de Barcelona (AGNELLO, 2005). Se desconoce si realmente algún retablo o pintura de los Serra llegó a Sicilia durante su corto reinado.

A finales del año 1362 o durante los primeros meses de 1363, nació su única hija, María de Sicilia (ca. 1362-1401), y, medio año después, la reina murió de epidemia. Era 18 de julio de 1363. La última noticia que tenemos de Constanza es que su padre, en diciembre de 1363, manda comprar blandones para la celebración en Perpiñán del aniversario de la reina de Sicilia (MR, 347, f. 203r.). La imagen desdibujada del sello de Constanza dice mucho de esta reina olvidada.

Fue reina de la Sicilia insular durante poco más de dos años, desde 1361 hasta 1363, pero la suntuosidad del conjunto de objetos que posiblemente llevó consigo al matrimonio tenía que ser de gran valor (SANTORO, 2007). Fue enterrada en la catedral de Catania en un sarcófago de mármol del cual creemos que solo se conserva la cubierta o gisantEs la tumba conocida como  “Sarcofago di Costanza di Aragona” que se conserva en la capilla de la Madonna de la catedral de Catania.

*Agradezco la colaboración de Stefano Cingolani.

Textos epigráficos

Inscripción encima del escudo de armas del Reino de Sicilia (pared izquierda del absis mayor de la catedral de Catania, hasta 1952).

CONSTANTIA PETRI III

REGIS ARAG[ON]UM

FILIA

AC FEDERICI III UXOR CATANIE

OBI[I]T ANNO SALU[T]IS MC[CC]LXIII

Textos documentales

Catania, Biblioteche Riunite Civica e. A. Ursino Recupero, Catania, 0542 y 0546.

Barcelona, Arxiu de la Corona d’Aragó, Reial Cancelleria, reg. 1067, f.90r.

Barcelona, Arxiu de la Corona d’Aragó, Reial Cancelleria, reg. 1133, f.26r.

Barcelona, Arxiu de la Corona d’Aragó, Reial Cancelleria, reg. 1134, f.37r-v.

Barcelona, Arxiu de la Corona d’Aragó, Reial Cancelleria, reg. 1134, f.44v.

Barcelona, Arxiu de la Corona d’Aragó, Reial Patrimoni, MR, 347, f.203r.

Barcelona, Arxiu de la Corona d’Aragó, Reial Patrimoni, MR, 472, f.17v.

Barcelona, Arxiu Històric de Protocols de Barcelona, AHPB 23/8, f.62r 17-4-1359.

Texto: Pilar Viladomiu.

Bibliografía abreviada

AGNELLO 2005, 30–32; CINGOLANI 2019,ACA reg. 1305, f.60v”; 2007, 226–227; SCIASCIA 2010/12, 111; FERRER I MALLOL 1992, 35–40; GIUNTA 1992, 17–27; SANTORO 2007, 71–106; SOLDEVILA 2014, 245; YARZA 2013, 95–106.

Bibliografía

AGNELLO Giuseppe, 2005, Ufficiali e gentiluomini al servizio della corona. Il governo di Siracusa dal Vespro all’abolizione della Camera reginale; CINGOLANI Stefano Maria, 2006, Les quatre grans cròniques. Jaume I, Bernat Desclot, Ramon Muntaner i Pere III; 2007, La memòria dels reis. Les quatre grans cròniques; FERRER MALLOL Maria Teresa, 1992, «La política siciliana de Pere el Cerimoniós» Els Catalans a Sicília; GIUNTA Francesco, 1992, «La Sicília catalana» Els Catalans a Sicília; LO FORTE SCIRPO M. Rita, 2003, C’era una volta una regina… Due donne per un regno: Maria d’Aragona e Bianca di Navarra; SANTORO Daniel, 2007, «Il Tesoro recuperato. L’inventario dei beni delle regine di Sicilia confiscato a Manfredi Alagona nel 1393» Anuario de Estudios Medievales; SCIASCIA Laura, 2011, «Les reines d’Aragó i Sicília» La política de les dones; SOLDEVILA Ferran, 2014, Crònica de Pere III el Cerimoniós; TASIS Rafael, 1961, La vida del rei en Pere III; VILADOMIU Pilar, 2009, Guia de les tombes reials del Casal de Barcelona; YARZA Joaquin, 1996,  «Maria de Navarra y la ilustración del Libro de horas de la Biblioteca Nazionale Marciana». Libro de horas de la reina María de Navarra; ZURITA Jerónimo, 2003, Anales de Aragón.

Imágenes